protagonistas del cambio en la cerveza

Millennials, carácter multidisciplinar, cerveceros -artesanos- y con acento andaluz. Son rasgos definitorios de Cervezanía, una mezcolanza de talento joven -pero ya experimentado- que le ha llevado a ser una de las empresas referentes en el panorama nacional en lo que ellos mismos llaman “la periferia” de la cerveza artesanal e independiente. Y ojo, porque sus kits de producción casera se exportan ya desde la capital andaluza a 26 países y amenazan con hacerlo próximamente al mercado asiático y al otro lado del charco. Con cercanía, su COO, Pedro Rodríguez Morillo, nos pone en situación en esta entrevista.

pedro rodriguez cervezanía

¿Cómo surge el proyecto de Cervezanía?

Cervezanía nace de un proyecto anterior, que era Cervezas Albero, una pequeña microcervecería que se convirtió en la primera cerveza artesana en Sevilla. A partir de ahí, y como cualquier cosa que va cambiando, descubrimos una oportunidad en el mercado cuando introdujimos las visitas a nuestra fábrica y cuando diseñamos un kit para que la gente pudiera hacer la cerveza en su casa. Dimos un giro de 180 grados para dedicarnos al tema del homebrew. Y desde entonces Cervezanía ha ido derivando en muchas más cosas.

¿Por qué esta apuesta decidida por la cerveza, y subrayo el adjetivo, de tipo ‘artesanal’? No sé si, además del nicho de mercado, había otro tipo de convencimiento y de afinidad hacia este tipo de cerveza…

Sí, por supuesto. Los fundadores somos cerveceros a todos los niveles. Además de consumidores, antes de que termináramos la carrera ya estábamos haciendo cerveza en casa y en el garaje. Y esa afición nos llevó a la profesionalización. Y aunque nuestra empresa ha ido derivando hacia un espacio de la periferia de la cerveza artesana, somos cerveceros y a ella nos dedicamos desde que comenzamos. Es nuestro leitmotiv.

¿También os sentís un poco (o mucho) #protagonistasdelCAMBIO?

Nos sentimos muy protagonistas. Creemos que somos una parte fundamental del cambio. Y te lo argumento. Cuando en Cervezanía creamos nuestro kit de elaboración, realmente pensábamos que iba dirigido a la gente muy cervecera. Pero estábamos totalmente equivocados. Vimos que funcionaba muy bien como regalo. Y esto tuvo una consecuencia muy interesante, y es la de que acercaba la cerveza artesana a mucha gente que no la conocía. Por lo tanto, creemos que también hemos contribuido a crear cultura cervecera y que somos protagonistas de ese cambio en el sector cervecero.

cervezania logo

¿Qué puede ofrecer Cervezanía a los cerveceros y a otros agentes del sector con ese carácter multidisciplinar de sus servicios?

Como no pudimos ni podemos estarnos quietos, a ese kit de elaboración le siguió la distribución de materias primas; concretamente distribuimos malta de la maltería The Swaen, que acaba de ganar, este año, el premio a la mejor maltería del mundo. Pero también somos cerveceros nómadas; estamos realizando trabajos de consultoría; estamos desarrollando recetas especiales incluso para la industria farmacéutica; trabajando con el ámbito universitario; hemos desarrollado maquinaria para el cervecero casero que ya está en un nivel avanzando; también contamos con máquinas de elaboración de cerveza y distribuimos periféricos para homebrewers… Realmente estamos abiertos a todo lo que tiene que ver con la cerveza artesana. También quiero destacar que hemos trabajado bastante el tema del eCommerce y, por ello, tenemos mucha presencia internacional, lo que nos permite abarcar otros proyectos interesantes; incluida la exportación de ideas de negocio.

Comercio electrónico pero también un buen marketing el que lleváis desarrollando en estos años desde Cervezanía. ¿Por qué esta apuesta tan decidida por esta parcela?

Tener claro que uno de nuestros pilares principales era el marketing fue algo que llegó al poco de comenzar con el proyecto Cervezanía. Hemos visto cómo, en ocasiones, las empresas cerveceras están muy centradas en la elaboración de su producto, en hacerlo perfecto, exclusivo y de calidad; es algo que también nos pasó a nosotros en los inicios, centrarnos solo en nosotros mismos. A los pocos meses nuestros canales se ampliaban, y era necesario mejorar «qué queríamos mostrar de nuestra empresa/equipo y cómo». El marketing en Cervezanía es cualquier detalle que nos muestre y conecte con el exterior: una imagen o descripción de producto; una campaña publicitaria, un artículo en un periódico, un post en redes sociales, una reunión, la asistencia a una feria o congreso o incluso hasta la respuesta a una duda de un cliente. Intentamos cuidar cada detalle; no nos vale el «así mismo». Por eso es tan importante para nosotros esta parcela, y contar con profesionales implicados es esencial. Muchas veces el trabajo de marketing es invisible y etéreo, porque es muy cambiante y es difícil de medir. Pero cuando se tienen buenas ideas, una buena estrategia, empeño, dedicación y compromiso, los resultados no tardan en llegar. Es algo que suele sorprender de Cervezanía, quizás porque en otras empresas del sector no se le da el valor que realmente tiene. Pero hacer un marketing directo, sencillo, cercano, que aporte valor, y que cuente nuestra historia, es esencial; así debería ser para todas las empresas de este sector.

¿Por qué habéis hecho de la distribución en España de las maltas The Swaen una seña de identidad?

Es una malta que, si bien ahora no es muy conocida en España, nos decantamos por ella por su calidad. Asistimos a muchas ferias internacionales a lo largo del año, algunas de las más importantes, y en ellas hemos ido conociendo su historia. Siendo tradicionalmente una maltería para cerveceras industriales, en 2015 la compra una familia de inversores que la transforma en una maltería únicamente para la industria craft. En esos momentos incorporan una tecnología que no tiene absolutamente nadie en Europa y hacen unas maltas con una calidad indiscutible. Nosotros siempre decimos que es el Ferrari de las maltas. Todo va a paso a paso, es una maltería que es pequeña en comparación con otras y vamos creciendo un poco de la mano. Los clientes que tenemos que utilizan estas maltas están muy contentos y han ganado un montón de medallas en los últimos concursos, como en el BBF.

maltas the swaen cervezanía

¿Qué productos estáis exportando más allá de las fronteras españolas?

Lo que más exportamos son nuestros kits de elaboración. De hecho, vendemos muchos más fuera que en la propia España. Donde más estamos vendiendo es en Francia, pero después exportamos a otros 25 países. Y ahora, a partir de este verano, vamos a empezar a exportar a China. Además, en nuestros deseos y previsiones están el que lo hagamos a final de este mismo año a Estados Unidos y México.

A nivel más local y regional, ¿cómo y dónde sitúas el movimiento de la cerveza artesanal en Andalucía y en Sevilla, ciudad en la que os asentáis?

Hay cerveceras que, desde luego, están haciendo las cosas muy bien. Es obvio que falta mucho desarrollo, pero en un sector que está creciendo a buen ritmo. Se están abriendo fábricas muy interesantes, que se unen a otras ya asentadas desde hace unos años y que continúan creciendo. El problema que tenemos aquí en Andalucía es que muchas tendencias suelen llegar un poquito más tarde que en otros lugares de España. A nivel de consumidor todavía queda mucho trabajo por hacer. La cuota de mercado -de la cerveza artesana- es muy pequeña y es el talón de aquiles que tenemos que evitar. Tenemos que conseguir que la gente conozca la cerveza artesana. También los precios más bajos a los que estamos acostumbrados por aquí en la cerveza pueden ser un obstáculo. Pero todo llegará al igual que ocurrió con el vino. Llegará el momento en el que  se generalicen las cartas de cerveza en los bares. Y ahí estamos luchando todos: elaboradores, distribuidores y demás. Se trata de crear cultura cervecera.

Mójate: ¿qué va a ocurrir en el sector cervecero en general y en el artesanal e independiente en los próximos 2-3 años?

Creo que la tendencia puede ser similar a la ocurrida en Estados Unidos. Está claro que las cerveceras industriales se han lanzado a adquirir algunas fábricas y están invirtiendo en productos y cervezas diferentes. Eso creo que va a seguir así en estos años. Pero también creo que los cerveceros independientes también irán creciendo al ritmo que marque el conocimiento del consumidor y la cultura cervecera que se está creando. Yo no soy contrario a que las cerveceras industriales y las multinacionales se hayan metido en esto, porque creo que beneficia en tanto en cuanto crea cultura. Y tiene que haber cabida para las cerveceras independientes, porque el margen de crecimiento es brutal. Y también creo que el consumidor va a aprender a distinguir entre una y otra, lo que garantizará una convivencia en armonía. El futuro, en mi opinión, es muy halagüeño.

¿Qué le falta, qué le aprieta, qué le molesta al sector ‘craft beer’ en España?

Hay que continuar con la profesionalización, sin duda. Todo pasa, igualmente, por una buena formación y, por otro lado, que haya una unión fuerte entre los cerveceros independientes, como está haciendo AECAI. Son muchas empresas y cerveceras de pequeño tamaño, donde incluso las más grandes siguen siendo pequeñas, y si nos unimos a todos los niveles podremos defender nuestros intereses y profesionalizarnos con los conocimientos de unos y las carencias de otros; con errores, con virtudes o abriendo juntos canales de comercialización.